Continuando con este deseo mío de que este año nos demos cuenta de como la magia se manifieste en nuestra vida, me he encontrado este video encantador.
¡Cuantas veces me he sentido como esta niña... ciega y caminando guiada por ojos ajenos!...
Ha hecho falta que sucediera algo que en ese momento sentí como dramático... o doloroso... o simplemente que me hizo sentir insegura ante lo nuevo, para que me diese cuenta de lo que era capaz.
¿No pensáis que como esa niña, cuando movemos nuestra varita mágica todo cambia a nuestro alrededor...?
Estoy plenamente convencida de que siempre, siempre, hay una varita mágica en nuestras manos... la pregunta es...
¿Que estamos dispuestos a crear con ella?
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